Poesía, Filosofía y Música para pastillas.

domingo, 17 de marzo de 2013

domingo, 10 de marzo de 2013

Primera decepción, última conversación

Solíamos hablar durante horas sobre tantas cosas, desde poesía hasta comida exótica. Pero la cosa de ponía espesa cuando había que hablar de él.... Parecía tema tabú. Era cuestión de estar en un momento riendo sin parar pero cuando le decía ''te acordás de...'' y cualquier historia referida a él su cara cambiaba completamente, la sonrisa burlona se convertía en seriedad medio trillada, los ojos se le volvían espesos parecía recordar todo en ellos que se nublaban y casi casi que querían asomarse unas lágrimas acumuladas de tristeza que ella, por supuesto, secaba rápidamente . El cuerpo se le deshacía, se asomaba el dolor escondido, su cara se volvía pálida, mientras que yo le hablaba y le recordaba todos los lindos momentos. Ella mantenía su cabeza gacha y a veces sonreía, reviviendo las memorias escondidas. Todo, todo se destruía en su interior y su boca se abría como que deseaban escaparse un montón de palabras casi muertas, pero se retenía, se arrepentía y las palabras quedaban ahí, guardadas como debía ser. Yo la observaba, su tristeza llegaba a mi corazón, yo la entendía, me dolía, después de todo ese había su ''primer amor'', la primera decepción, la primer lágrima con derecho, lo que nunca se olvidaría. Cuando terminé mi relato la miré como esperando a que su pena fuera liberada. No dijo una palabra. Y luego de un silencio prolongado, esbozó una sonrisa sarcástica y mirando a los recuerdos me dijo, con una voz rajada: ''Sabés? Siempre imaginé al amor como algo bello, ahora me doy cuenta que lo único bello fue creer que había amor''. No dijo  nada más, cambió de tema. Aquella vez me di cuenta que ya no habría otra vez,había sido la última oportunidad para hablar de ese tema. Sonrió forzadamente y habló, otra vez de todo, todo menos de él.

martes, 5 de marzo de 2013

Lejanías

La noche esta casi helada
y su café se enfría lentamente
a ella no le importa,
ella lo disfruta,
lentamente.
Mira hacia el ventanal
y piensa, quizás
en aquel amor
que aún no llegó a su encuentro.
Y retuerce su cabello
e imagina, tal vez
el encuentro soñado
con su hombre amado.
Pide a gritos
en un silencio mudo,
que la salve 
de esta vida desecha.
Imagina, otra vez.
Un sueco, a lo mejor,
aspecto frío, 
pero mirada cálida
Se sumerge en su mundo
y se pregunta:
''Dueño de mis desvelos,
ser sin forma precisa,
enigma de mis pensamientos
¿Pensarás tanto en mi
así como yo en ti?
En noches heladas como esta
e incluso en días cálidos
de sol alegre
¿Me desearas en forma desesperada?''
Y la escena se repite
mientras ese café
ya se ha enfriado
y el cigarrillo
se consume con prisa al frío.
Aún mira las estrellas,
pues entiende
que lo bueno
tarda en llegar.
Y con una esperanza cansada
se levanta de su sueño
volviendo así
al infame mundo.
Y silenciosa
sale por la puerta
en busca de su amor.
Como quien es
impulsado de repente.
Sabe que en alguna estrella
él aguarda su llegada.